Si quereis leer el relato en esta web, lo podeis hacer en el siguiente enlace:
http://estanochetecuento.blogspot.com.es/2013/08/ago119-infestacion-de-alfonso-carabias.html
Sus palabras me dejan por
momentos desconcertado, sin reacción, pero en un instante mis sospechas se
vuelven certezas y todo cobra por fin un sentido claro e inequívoco.
Que el primer exterminador no
consiguiera acabar con ellos no lo consideré más que el fruto de una
incompetencia dispersa con la que de cuando en cuando uno se cruza.
El que la segunda empresa tampoco
lograse su cometido me pareció una variable más dentro de una casuística
anárquica que no terminaba de entender.
Pero el tercer intento llevó a mi
casa un hombre de atuendo oscuro y tez sombría que apenas necesitó un momento
para establecer un dictamen que cayó sobre mí como el mazo de un juez que dicta
sentencia.
Creo que siempre lo supe, o quizá
lo sospechara, aunque en ningún caso lo quería reconocer; cuando ese hombre, o lo que quiera que fuese,
dijo que los gusanos que desde días atrás infestaban mi casa y mi vida no
provenían de ningún sitio en general sino de mis entrañas en particular los acontecimientos
se precipitaron; reconocí lo irremediable y eché la vista atrás, dejando a
continuación que todo siguiera su curso hasta el final.